Paisaje de luz y sombra, Telde

Ubicación
C. Doce de Octubre esq. C. Américo Vespucio. Melenara
35214 Telde

Año de terminación
2023
Superficie construida
4.248,79 m²

Arquitecto
Pedro Nicolás Romera García
Arquitecta
Carlota Ardanaz Petit
Arquitecta
Yudit Barreto Martín
Arquitecto
Luis Guijarro Bergeron
Arquitecta
Rosalba Santana González
Arquitecta estructuras
Eva Parcel Adán
Ingeniero industrial
Constantino J. Gonzalvo Ortiz
Técnico ambiental
Marco Díaz-Bertrana Sánchez ()
Promotor
Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de la Ciudad de Telde SLU, Fomentas
Constructores
Preconte Construcciones y Servicios 91 SL

Memoria

El proyecto del Parque Urbano de Melenara nace como una experimentación en el territorio litoral abierto al atlántico y su capacidad de transformación. Frente a otros espacios verdes que se apoyan en una topografía o vegetación preexistente, aquí se parte de un vacío sin huellas ni identidad, que se convierte en una oportunidad para construir un paisaje desde lo esencial. Se plantea como un sistema de luz (natural y artificial) y sombra entre elementos naturales (roca y vegetación), sociales y culturales, donde el proyecto revela un nuevo paisaje de luz y sombra característico del litoral de las Islas Canarias.

La intervención propone superponer al espacio público, actividades que configuran su forma erosionada, y un espacio público totalmente accesible para los vecinos y visitantes de 4.000 m2 de superficie: áreas de esparcimiento, juegos infantiles, zonas expositivas y de feria semanal en sombra. El parque se organiza a partir de dos ámbitos complementarios, uno abierto a la luz, entre rocallas con vegetación halófila; y otro cubierto en sombra (como veladura coloreada) con vistas al mar. Ambos dialogan con las condiciones ambientales del entorno y con las necesidades de quienes lo utilizan mediane la incorporación de gradas, zonas de descanso y un área de juegos con pavimento blando. Se conserva así el carácter abierto del lugar, integrando nuevas funciones sin perder su esencia litoral.

Con una vocación sostenible, el proyecto optimiza recursos y plantea un mantenimiento mínimo de todos sus elementos. Se construye un ecosistema vegetal halófilo adaptado al medio costero, que evoluciona con el tiempo y mejora el confort del visitante a través de una red de recorridos verdes y zonas de estancia. El mobiliario se inserta en el entorno con formas suaves, como si hubiesen sido moldeadas por el viento y la sal. La iluminación mediante iluminación led con captación solar aisladas, refuerza la autosuficiencia del conjunto, sin necesidad de arquetas ni canalizaciones enterradas.

Ubicación: